¡Zapata vive! A través de la Cultura Popular Suriana

La presencia del General Emiliano Zapata Salazar y la lucha zapatista, su esencia, ideales y convicción, se encuentran simbólicamente en gran parte del país, trascendiendo en los procesos artísticos y culturales de los pueblos surianos en manifestaciones del arte popular y diversas representaciones artísticas, motivo de esta exposición, que tiene por objetivo develar desde la mirada de sus creadores, su visión de lucha social, representada a través de la exhibición de los objetos personales que portó “Miliano” (como era nombrado por los pueblos y allegados), piezas de coleccionistas, artistas dedicados a la pintura y el grabado, arte popular y manualidades son expuestas en la Sala Cristina Payán de este recinto, elaboradas con diversas técnicas artísticas y artesanales que, de manera individual y colectiva mantienen una identidad fortalecida por los anhelos justicia que enarboló el Ejército Libertador del Sur y su General en Jefe.

La Cultura Popular Suriana estuvo compuesta por pueblos de tradición mesoamericana que mantuvieron estrechos vínculos a través de diversas manifestaciones de la Cultura Popular en la región (Guerrero, Puebla, Morelos, Ciudad de México y Estado de México) y hoy se hacen presentes en ¡Zapata Vive! a través de la Cultura Popular Suriana.

Museo Nacional de Culturas Populares

Cultura Popular Suriana

La región suriana es un espacio político, social y cultural con una dinámica propia que se comenzó a configurar con el declive de la administración colonial desde finales del siglo XVIII. Hoy en día, la región comprende las entidades federativas de Guerrero, Morelos, Ciudad de México, Puebla y Estado de México, no obstante, sus pobladores, a lo largo del siglo XIX, mantuvieron por varios años el sentido de pertenencia hacia al territorio del sur, elemento que les permitió utilizar el gentilicio de surianos por lo menos hasta la revolución. Esa identidad se remarcó con la existencia de líderes regionales que se auto adscribieron de esa forma, tales como Vicente Guerrero, Nicolás Bravo, Juan Álvarez y Emiliano Zapata, quien comandó los pueblos en armas con el nombre oficial del “Ejército Libertador del Sur” en alusión a este gran territorio que sufrió injusticias por los cacicazgos y un proceso de olvido en los años posteriores a la Revolución, pero su lucha no termina.

El plano sociocultural de la región suriana de México estuvo compuesto por pueblos de tradición mesoamericana que mantuvieron estrechos vínculos a través de diversas expresiones de la cultura popular que emergen de la estructura social y, en este caso, como producto de un sistema de vida del pueblo. De esta manera, la cultura suriana estuvo enmarcada por la importancia de la milpa y el ciclo agrícola que dio sentido a la vida cotidiana y ritual. Por ello, la mayoría de los territorios surianos fueron lugares de peregrinaje y vinculación entre comunidades que conmemoraban la relación fraternal entre la religiosidad y los ideales zapatistas posrevolucionarios. De igual forma, diversas danzas como los tecuanes, tlacololeros, chinelos, vaqueros, diablos, pastoras, entre otras, que eran parte de la vida festiva de las comunidades e incidían en un proceso de expansión debido a esas relaciones sociales existentes.

Emiliano Zapata no ha muerto. Su esencia, ideales y convicción se encuentran en el territorio suriano, vigentes en los procesos culturales de los pueblos en el presente y se diversifica en las manifestaciones de sus creadores.

Armando Josué López Benítez

Historiador

Título: Guardián del pueblo – Guardián de la noche
Autor: Yony Calixto
Lugar: Ahuehuetitla, Puebla
Técnica: Tallado en madera de zompantle y pintura
Medidas: 30 x 24 cm.

Las máscaras de tecuan, ocupadas en las diversas danzas afrodescendientes del país, forman parte de la tradición de los pueblos surianos. Emiliano Zapata Salazar, representado simbólicamente en modo dual como Zapata – Tecuani, refiere a la dualidad entre el General como el corazón del pueblo y el Tecuani como el guardián de la Mixteca Baja poblana.

Título: Zapata con marcas de ganado
Autor: Alberto Gironella
Año: 1972
Técnica: Collage sobre madera
Medidas: 100 x 80 cm.

Los pueblos surianos liderados por el nativo de Anenecuilco, disputaron su derecho a existir. Su resistencia y lucha siguió aún con la muerte del General Zapata, incluso hasta el día de hoy. Alberto Gironella en su obra «Zapata con marcas de ganado», muestra simbólicamente, como un elemento significante, las balas recibidas por el Gral. Zapata el día de su ejecución.

Título: Montura texana, regalo del Gral. Francisco Villa al Gral. Emiliano Zapata en Xochimilco
Año: 1914
Colección: Familia Castro Zapata

Son múltiples los testimonios de la participación activa de Emiliano Zapata en actividades de jaripeo y charrería. La montura texana es un regalo del Gral. Francisco Villa al Gral. Emiliano Zapata.

Título: Triunfo de Zapata
Autor: Pedro Martínez López y Lucy Flores
Lugar: Acatlán de Osorio, Puebla
Técnica: Barro

La participación popular fue importante para el zapatismo. La esencia del Ejército Libertador del Sur eran las comunidades: mujeres, hombres, niños y ancianos.
Esta pieza de arte popular muestra pasajes de la vida de Zapata en tres momentos:
1- La infancia de Zapata como agricultor y su entorno.
2- La etapa revolucionaria, Zapata en batalla.
3- La conexión entre su etapa revolucionaria y su muerte.

Título: Balero – Juguete tradicional
Autor: Desconocido
Colección: Familia Castro Zapata
Lugar: Morelos
Medidas: cabeza 6.5 cm., mango 13 cm., hilo 32 cm.

Emiliano Zapata sigue siendo un elemento fundamental en la memoria de los pueblos surianos, su vigencia es tal que tiene diversas representaciones como en los juguetes tradicionales. El balero es un juego tradicional en el Centro-Sur de México, se hace de caoba, oyamel, pino u otros materiales, los artesanos lo suelen pintar y decorar de acuerdo con sus parámetros culturales, por ello, “Miliano”, como comúnmente era nombrado por el pueblo, sigue siendo trazado por los creadores de la región suriano-zapatista.

Título: Sable del Gral. Emiliano Zapata utilizado en la toma de Cuernavaca, Morelos
Año: 1911
Colección: Familia Castro Zapata
Técnica: Acero fundido con madera e hilo de plata en la empuñadura
Medidas: 41 cm. de largo

Durante la etapa de la Revolución Mexicana, el sable fue para los zapatistas un símbolo de jerarquía militar. En el periodo revolucionario los zapatistas se fotografiaron con sables en las manos, símbolo de su ascenso en el escalafón del Ejército Libertador del Sur.

Av. Hidalgo 289, esquina con Allende, Col. Del Carmen, Coyoacán

Del 17 de Noviembre del 2022 al 26 de Marzo del 2023

Entrada libre

Vestíbulo y Sala Cristina Payán